Responsabilidad Afectiva

Este tema está en boca de todos, pero no siempre es utilizado de la mejor manera. Ya que en muchas ocasiones lo que ocurre es que se usa a favor pero no como una verdadera responsabilidad de todos, ya que la Responsabilidad Afectiva, en pocas palabras, es la manera ética de relacionarnos con los demás entendiendo que nuestras acciones o inacciones impactan en las emociones del otro.

El otro puede ser tu pareja, tu casi algo, tu amistad, tu familiar, tu compañero de trabajo. Cada relación que nosotros tenemos debe ser tratada con el mismo cuidado y no andar por la vida como “Yo soy así, si les molesta es su problema, no el mío” o “¿Qué quieren que haga? Yo soy así y así me moriré”. Tenemos la obligación moral y ética de respetar las emociones de los demás por el simple hecho de que es otro ser humano igual a mi.

Para hacerlo más fácil, además de los puntos que te compartí en el Ep 102, te traigo estos puntos para aprender a ser más afectivamente responsable:

1. Comunica tus deseos. Di en voz alta lo que crees que puede ayudar a tener una mejor relación y escucha lo que la otra persona tiene para ofrecer. Sólo es posible crear acuerdos cuando los dos ponen las cosas bajo la mesa con respeto y atención.

2. Establecer límites. Hay cosas que no queremos o no nos gusta que pasen, así que hay que comunicarlos y dejar bien en claro cuáles son las cosas que no se permiten y hasta dónde llega nuestra relación.

3. Analizar el origen de nuestras emociones. Las acciones impactan nuestras emociones, pero la gestión de las mismas es completa responsabilidad mía. Así que pon atención a lo que sientes, cuándo lo sientes y por qué lo sientes. Tal vez haya algunas cosas que arreglar en ti y que no tienen que ver con el otro, sino contigo.

4. Sé coherente. Si algo vas a pedir, asegúrate que tú también lo ofreces. Nunca será fácil relacionarse con el otro, pero no se vale exigir cosas que tú no vas a respetar o que no son valores que también te esforzarás en garantizar.

5. Aprende a vivir en el cambio. Todo puede cambiar de un día para otro, así que avisa o pide que te avisen para estar los dos en la misma sintonía. Puede ser que antes quería hijos y ahora no, o que estaba buscando algo serio, pero ya no, o que quería un free pero ahora si me interesa una relación formal. Lo que sea que sea, compártelo para que las cosas sigan funcionando entre ustedes.

Ser responsables afectivamente nos ayudará a tener relaciones sanas, reales y que verdaderamente funcionen. No significa que nos olvidaremos del dolor o que todo será perfecto siempre, pero si somos realmente responsables podremos entender bien el juego y jugarlo para que lo disfrutemos los dos.